Durante el viaje a Navarra, en concreto al valle del Roncal, nos informamos que allí se encontraba el el Dolmen de Arrako.
Según la información que he podido recopilar, el Dolmen de Arrako es un monumento funerario del megalítico. Es los que los expertos denominan un Dolmen de corredor, largo y abierto.
Este fue excavado por Fernández Medrano y J. Maluquer hace relativamente poco tiempo, en el año 1961.
Como monumento, se trata de un sepulcro con cámara rectangular-trapezoidal formada por 7 losas (seis laterales, dispuestas tres a tres, y una de cierre, situada en la cabecera, con túmulo de unos 9 metros y un cromlech de 15 testigos.
Un cromlech es un monumento megalítico formado por piedras o menhires clavados en el suelo y que adoptan una forma circular o elíptica, cercando un terreno. Este tipo de monumentos están presentes por Gran Bretaña y por la Bretaña francesa, así como en la Península Ibérica, Dinamarca y Suecia.
En el mismo centro, incrustada en el túmulo, se encuentra la cámara orientada hacia el sureste.
Al el Dolmen de Arrako le faltan las losas delanteras, que muy probablemente habrían sido aprovechadas en construcciones agropastoriles de las inmediaciones.
Según los estudios, en el interior del Dolmen de Arrako se han encontrado elementos como ajuar. Entre ellos puntas de flechas de silex, fragmentos de cintas de cobre, puntas lanceoladas de cobre y bronce, un gran colgante fabricado en un colmillo de jabalí, cuchillos de sílex, cuentas de piedra, botones de marfil de forma prismática triangular con perforación en V y una laminita de oro doblada como colgante.
Nota: Base de la información original de Fernando Hualde.
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